El reconocimiento de Wikipaella por poner en valor el más elevado compromiso de la hostelería con la cultura gastronómica.
Cuando un Mestre Paeller recibe una ‘Cullera de Fusta’, está recibiendo el reconocimiento a la excelencia en la Paella. El cocinado a leña, requisito imprescindible para ganar este galardón, junto a la máxima exigencia y pasión por las cosas bien hechas, hace que pocos Mestres Paellers en el mundo puedan exhibirlo.
En la leña está la diferencia.
La receta tradicional, la calidad de los ingredientes y la maestría son elementos clave para que una Paella sea auténtica. Pero si hay algo que la convierte en un bocado sublime es la combustión vegetal. Y es que la leña es capaz de otorgar a la elaboración la intensidad en el sabor y el aroma que diferencian una paella de una gran paella.
Como cada año Wikipaella, la asociación por el conocimiento y reconocimiento de las auténticas paellas, ha entregado los premios anuales a los restauradores que “tratan la paella desde el cariño y el respeto por la tradición”. Y también, como cada, año Rafa Margós ha recibido el galardón preferido para cualquier Mestre Paeller que se tercie: la ‘Cullera de Fusta’. “Las paellas cocinadas a fuego vivo con leña de naranjo o sarmientos entran en un plano gastronómico superior. Emplear combustible vegetal requiere instalaciones amplias y específicas, y además plantea una logística compleja”, afirman desde Wikipaella.
Los Margós, la familia que regenta el paellero más gran del mundo, es el clan con más “Culleres de Fusta”: 11 en total, 7 para Las Bairetas Chiva y 4 para Las Bairetas Dénia. Ahora, el sueño del primogénito es llevar esa paella multipremiada (que le enseñó a cocinar su padre) a cualquier rincón del globo terráqueo.